El nombre que se ha dado a esta tierra llena de historia y en gran parte todavía indómita, constituye una señal de respeto a los maestres de las órdenes de caballería que en otrá época se encargaron de su defensa y la repoblaron a partir del siglo XII. La gran parte de sus pueblos data de esa época, aunque algunas de ellas son de origen árabe o incluso anterior.
Si visitamos el Maestrazgo y queremos tener una visión clara y auténtica de la región, no debemos dejar de visitar las poblaciones de Cantavieja, Iglesia del Cid, Molinos, Mirambel, Morella o Olocau. Estos son los pueblos más genuinos de la zona, dándose la circunstancia de que muchos de ellos están amurallados o se encuentran localizados en parajes agrestes de una belleza sin igual.