Cuando se contrata un viaje combinado en el que se van a visitar varias ciudades y lugares, los folletos de la agencias de viajes indican la categoría de los hoteles en los que nos van a alojar. Lo normal es que en este tipo de viajes se elijan alojamientos de 4 ó 5 estrellas.
El problema puede surgir cuando estemos realizando el propio viaje y nos encontremos con que los alojamientos no se corresponden realmente con lo ofertado en los catálogos de la agencia de viajes, ocurriendo que la ubicación de los hoteles no sea la más idónea y que las habitaciones del mismo disten mucho de ser las correspondientes a un hotel de la categoría contratada. Y podría incluso ser mucho peor si las condiciones de salubridad e higiene dejan mucho que desear.